Llevamos unos días con unos atardeceres muy interesantes. Al oeste tenemos a Venus luciendo muchísimo, y un poco más abajo a Júpiter, que es mucho más grande pero está mucho más lejos con lo que luce bastante menos. Y si miráis a Júpiter con unos prismáticos veréis a su lado a sus satélites.
Este fin de semana se ha añadido a la fiesta la Luna que ayer pasaba al lado de Venus, y son los protagonistas de mi foto.
Al hacer la foto tenía otra opción que deseché. Al mirar a la Luna a simple vista se veía perfectamente la parte oscura completando el disco lunar. Esto se debe a que cuando tenemos luna nueva, en la Luna tienen "tierra llena", y el reflejo que produce es tan grande que la luna se ilumina bastante. Esa luna semiiluminada se llama luna cenicienta. La pega para que se vea en la foto es que, si se quiere que salga la parte cenicienta, la parte iluminada se quema y sale sin ningún detalle.
Tratamiento digital: recorte, paso a blanco y negro, añadido del marco.
Comentario acerca del tratamiento de esta foto: habitualmente cojo la foto grande que hace la cámara y la reduzco hasta un tamaño pequeño. Hoy no. Hoy he recortado sobre la imagen original un trozo y esa es la foto que subo, así que si la aumentáis al 100% es igual que como yo veo la Luna y Venus al 100% en mi foto original. No he hecho ningún tratamiento del ruido.
Canon 60D + 100 mm f2.8 EF L IS USM macro 1/1000 segundos, f3.2, ISO 800, 160 mm equivalentes, a pulso, modo manual.
He comprado un teléfono listo, de los nuevos, con sistema operativo Android, y estoy encantado descubriendo las inmensas posibilidades que tiene (aparte de servir para hablar por teléfono, claro). Una de las partes más flojas es la cámara de fotos. No tiene enfoque ni flash, el zoom es inservible y la nitidez más que discutible. En vez de un objetivo tiene un agujero diminuto. Pero hace fotos, de día y de noche, y siempre está a mano. Nos estamos haciendo amigos.
Llevamos unos días con unos atardeceres muy interesantes. Al oeste tenemos a Venus luciendo muchísimo, y un poco más abajo a Júpiter, que es mucho más grande pero está mucho más lejos con lo que luce bastante menos. Y si miráis a Júpiter con unos prismáticos veréis a su lado a sus satélites.
