
Uno de los cambios ocurridos en los últimos años, de los que la mayoría de la gente no es consciente, se refiere a las fuentes de nuestro sustento. Hace 50 años, la economía agrícola era básicamente local. El agricultor producía vegetales que vendía al ganadero o casi directamente al consumidor (verduras, legumbres, etc...). En cada lugar había unas plantas típicas de cada zona y perfectamente adaptadas a ese medio. Eso hacía que la diversidad genética de estas plantas cultivadas fuese inmensa.
Sin embargo la actividad agrícola actual se mueve se una forma completamente distinta. La escasez de margenes económicos obliga a que el agricultor actual trabaje con un número muy muy reducido de variedades, las más rentables, que además son las mismas incluso a nivel nacional. Eso hace que la diversidad genética sea super escasa. Como dice el dicho: "Dios nos pille confesados"
Tratamiento digital: retoque de curvas, reducción de tamaño, aumento de nitidez y añadido del marco (todo con el Gimp).
Fujifilm Finepix S100FS, 1/220, f2.9, ISO 100, 32 mm, macro.